LA ESTRUCTURACIÓN DE LA ACTIVIDAD:
EL CURRICULUM VITAE Y LA GRAFOLOGIA |
Madrid, junio de 1991
Autoras:
María Luz Zamora Loureiro
María Luz Diez Zamora
Rosario García Fernández
Cuando realizamos un análisis grafológico, lo que hacemos es predecir – a través de la escritura- comportamientos del sujeto relacionados con la estructura profunda de su personalidad y con los hábitos que ha adquirido a lo largo de su socialización. Esto puede ser espacialmente útil en los procesos de Selección de Personal, donde lo que buscamos es, con el menor despliegue de medios posible, determinar en qué grado podrá desenvolverse con éxito cada candidato en un puesto de trabajo.
Hace varios años, iniciamos diferentes líneas de investigación, con el objetivo de encontrar instrumentos adecuados para validar la Grafología. Lo que presentamos aquí es el resultado de la primera fase de uno de nuestros diseños experimentales.
Una de las primeras características que buscamos en cualquier persona que desea desempeñar un puesto de trabajo concreto es que sepa estructurar sus actividades para obtener resultados positivos. El Currículum Vitae es el primer dato de que disponemos para evaluar hasta qué punto el candidato es capaz de enfrentar con éxito la primera prueba a que se le somete para comprobar sus capacidades. Por eso puede ser un buen predictor de su rendimiento.
Existe un modo convencional de presentar un Currículum Vitae. De hecho, cualquier persona que busca un puesto de trabajo dispone de diversas fuentes para informarse acerca de la forma más adecuada para hacerlo. Estas fuentes abarcan desde lo más informal –amigos o conocidos- hasta lo formal –INEM, academias especializadas, etc.-, de modo que, cuando una persona presenta su Currículum Vitae mecanografiado, puede adaptarse a las normas establecidas o, por el contrario, buscar su propia forma de estructurarlo. Con la escritura sucede algo parecido –sobre todo, con la carta manuscrita que acompaña al Currículum- porque también existen normas de presentación de una carta que se envía a una persona o entidad con las que no se tiene contacto y a la que se quiere causar buena impresión.
LA ESTRUCTURACIÓN DE LA ACTIVIDAD
Entendemos Estructuración de la Actividad como capacidad de la persona para disponer los medios a su alcance, de modo que consiga los objetivos que se propone en cada una de sus actividades.
Partimos de la base de que, para que una persona pueda estructurar bien sus actividades es preciso:
1. Que comprenda cuál es el objetivo de cada actividad.
2. Que pueda concentrar su atención en ellas.
3. Que sepa canalizar sus energías y utilizar su tiempo.
4. Que mantenga una disciplina en su realización.
5. Que diferencie lo esencial de lo superficial.
Basándonos en lo anteriormente expuesto, pensamos que el Currículum Vitae puede ser comparable a la Grafología como predictor del comportamiento del candidato. Es por ello que utilizamos como material de trabajo una carta manuscrita y el Currículum Vitae mecanografiado.
Para comprobar nuestra hipótesis, elegimos una muestra de 185 sujetos, participantes todos ellos en un proceso de Selección de Personal. Con esto tratamos de eliminar algunas “variables extrañas” que pudieran distorsionar nuestras conclusiones. La muestra es, por tanto, homogénea en lo que se refiere a varios factores que pueden afectar a la calidad gráfica o a la presentación del Currículum, sobre todo:
F Nivel académico (todos son titulados superiores).
F Grado en que se consideran capacitados los candidatos para desempeñar funciones donde la aptitud para estructurar acertadamente sus actividades es de vital importancia.
F Grado en que los candidatos deben conocer el significado de cada uno de los factores que intervienen en un proceso de Selección de Personal (el puesto al que optan pertenece al área de Desarrollo de Recursos Humanos en la empresa).
Tanto por lo que se refiere a la escritura como a la presentación del Currículum Vitae, pensamos que las personas que componen la muestra deben conocer –por su nivel de formación- las normas culturales al respecto. Es por ello que cualquier desviación de lo que se considera convencional puede ser evaluada como significativa.
La hipótesis inicial nos lleva a elaborar la siguiente tabla de correspondencias entre los rasgos gráficos y las características del Currículum Vitae:
ESCRITURA
|
CURRÍCULUM |
Tamaño Normal o Pequeño |
ü Descripción sencilla de formación y experiencia profesional, así como de los datos personales. ü Ausencia de calificativos respecto de uno mismo.
|
Sin adornos, bien trazada o caligráfica. |
ü Presentación convencional. ü Ausencia de detalles personales. |
Cuidada, signos de puntuación colocados en su lugar (barras de “t”, puntos de “i” y j”, etc.). |
ü Ausencia de errores u omisiones de letras o puntuación. |
Márgenes normales y regulares. |
ü Márgenes normales y regulares. |
Escritura clara. |
ü “Puesta en página” clara. ü Lenguaje claro y preciso. |
Punto y aparte sistemático |
ü Punto y aparte sistemático. |
La elección de los rasgos de la tabla se hizo considerando la interpretación que se les atribuye a los mismos desde el punto de vista grafológico, tal como podemos observar en la tabla de la página siguiente:
TENDENCIA PERSONAL
|
MANIFESTACIÓN GRÁFICA |
Capacidad para comprender el objetivo de la actividad y diferenciar lo esencial de lo accesorio. |
Ø Ausencia de adornos o rasgos superfluos. Ø Escritura clara.
|
Capacidad de concentración en la actividad. |
Ø Ausencia de errores u omisiones en letras o puntuación. Ø Espaciamiento normal. |
Capacidad para canalizar las energías en la realización de la actividad y rentabilidad el tiempo. |
Ø Tamaño normal o pequeño. Ø Ausencia de adornos o rasgos superfluos. Ø Márgenes normales y regulares.
|
Disciplina en la realización de la actividad |
Ø Márgenes normales y regulares. Ø Punto y aparte sistemático. Ø Espaciamiento normal. Ø Escritura bien trazada o caligráfica.
|
Debemos matizar que nos estamos refiriendo a actividades sujetas a normas, no a aquellas que exigen para su realización cierto grado de creatividad o de iniciativa personal, en cuyo caso no nos servirán los rasgos gráficos seleccionados. Lo mismo sucede con el Currículum Vitae porque no sería, en tal caso, un buen predictor del desempeño. Pensamos que, para el objetivo de esta investigación, son suficientes los rasgos gráficos anteriormente definidos.
Para encontrar las correspondencias relativas a nuestra hipótesis de trabajo, procedimos a medir los rasgos gráficos y las características del Currículum Vitae anteriormente descritas. Definiendo para cada uno de ellos los indicadores que aparecen recogidos en las tablas anexas (páginas 9 a 18).
Siempre que la fiabilidad de la medida lo aconsejó, utilizamos plantillas diseñadas al efecto, tal es el caso de tamaño y la regularidad de los márgenes o el tamaño de la escritura. En caso contrario, nos guiamos por indicadores cualitativos, uniformes para toda la muestra. Estos indicadores se refieren, en unos casos, al lenguaje utilizado en el Currículum y, en otros, a rasgos gráficos sólo mensurables mediante la observación directa. Nos referimos con esto a:
Ø Rasgos personales o adornos en la escritura, sólo determinables comparando el modelo caligráfico con la escritura del sujeto.
Ø Colocación sistemática del punto y aparte. Se trata de que los comienzos de las líneas que siguen al punto y aparte se coloquen siempre en el mismos lugar, no existiendo una norma que indique la medida del espacio que es adecuado dejar en blanco.
Ø Claridad de la escritura, determinada por el grado en que hampas y jambas no se mezclan entre sí.
Ø Espaciamiento normal, relacionado con el tamaño de la escritura, tanto en lo que se refiere a espaciamiento entre palabras como al espaciamiento entre renglones.
ANALISIS DE LOS RESULTADOS
La observación de los datos contenidos en las tablas anexas, nos indica lo siguiente:
F En la tabla 1, podemos ver que el 82% de las personas escriben con un tamaño normal o pequeño, 128 de ellas (84% dentro de este grupo) no utilizan calificativos respecto a su persona, sino que se limitan a describir sus características personales o profesionales. Por el contrario, de las 33 que escriben con tamaño grande, 18 (lo cual supone el 55% de ese grupo) utilizan entre 1 y 5 calificativos para hablar de sí mismos o adornan la descripción. La proporción parece indicar que puede existir mayor tendencia a perder tiempo y energía en la realización de sus actividades, centrándose en detalles que se relacionan más con su propia autoestima que con su desempeño profesional, dentro del grupo de personas que escriben con tamaño grande.
F En la tabla 2, encontramos que el 42% de los sujetos no utilizan ningún rasgo personal en la presentación de su Currículum Vitae y esto no parece guardar relación con los rasgos personales que aparecen en la escritura, ya que el porcentaje de sujetos que tienen 0 rasgos personales es semejante a los que tienen más de 10 (3%). Lo mismo podemos decir del 57% de la muestra, que se reparte por las diferentes categorías de la tabla. Podemos atribuir esto al hecho de que los rasgos personales en la escritura nos hablan de evolución personal o de capacidad para separarse de los valores colectivos, mientras que en la forma del Currículum Vitae mecanografiado la aparición de rasgos personales puede ser debida al desconocimiento de la norma.
F En la tabla 3, observamos que el 63% de los sujetos comete 0 errores en el Currículum mecanografiado, mientras que sólo el 48% no los comete en la escritura. Esto parece indicarnos que los sujetos tienden a prestar atención a la presentación del Currículum. Pero vemos también que 71% de esas personas (61% del grupo) no comete errores en la escritura. Vemos, además, que el porcentaje de errores en la escritura desciende proporcionalmente en este grupo y que el 33% de los sujetos que cometen entre 1 y 5 errores en el Currículum, 43 de ellos (69% del grupo) cometen el mismo número de errores en la escritura. Podemos interpretar que aquellas personas que se concentran adecuadamente en la actividad, lo hacen tanto al realizar un documento manuscrito como al mecanografiar y, en caso de no ser ellas las que mecanografían, prestan atención a los errores cometidos por la persona que mecanografía y los corrigen. Este extremo ha sido confirmado pero una muestra representativa de los sujetos.
F En la tabla 4, apreciamos que –en la misma dirección del apartado anterior- el porcentaje de personas que colocan el punto y aparte siempre en el mismo lugar (80%) en el Currículum mecanografiado es mayor que el porcentaje de las que lo colocan irregularmente y, dentro de ese 80%, es significativamente mayor (93%) el número de personas que lo sitúan regularmente en la escritura. Del otro 20% de la muestra que sitúa el punto y aparte irregularmente en la escritura, el 47% lo hace también en el Currículum Vitae mecanografiado. Esto puede tener relación con diversos factores, entre ellos destacamos uno significativo y bastante obvio: El porcentaje de irregularidad es mayor cuando se utiliza una máquina convencional que cuando se escribe con ordenador.
F La claridad de la escritura (tablas 5, 6, 7 y 8) parece estar más relacionada con la expresión del pensamiento de los sujetos que con la “puesta en página” del Currículum mecanografiado. Así, no encontramos diferencias significativas entre el grado en que se mezclan las hampas y jambas y el grado en que se separan los diferentes párrafos del Currículum mecanografiado (dejar doble espacio entre párrafos diferentes, por ejemplo). Parece que, también aquí, los sujetos tienden a presentar el Currículum con la mayor claridad posible, pero del 68% de las personas cuya escritura es clara, el 30% no separan los párrafos del Currículum, lo cual puede ser debido a que esa separación está más relacionada con la estética que con la conceptualización, ya que no sucede lo mismo con la diferenciación entre apartados, como podemos ver en la tabla 6. Esa separación entre apartados, además de su importancia estética, nos habla de la capacidad para organizar los datos de modo que se distingan unos de otros (cada apartado es un concepto distinto, mientras que los párrafos se refieren a datos pertenecientes a un mismo concepto).
F La claridad de la escritura parece tener relación, también, con la precisión del lenguaje que se utiliza ya que, como podemos ver, cuando hampas y jambas se mezclan o cuando el espaciamiento entre palabras no es adecuado, es más probable que el lenguaje sea poco preciso (se caiga en la ambigüedad, se den explicaciones irrelevantes o sea difícil entender la idea que el sujeto desea transmitir).
F Lo que respecta a los márgenes (tablas 9 y 10), parece aportar información destacable, ya que no se aprecian correlaciones significativas entre el Currículum y la carta manuscrita. Pensamos que ello es debido a las propias limitaciones que impone la máquina con la que se mecanografía.
En términos generales, se aprecia mayor grado de correspondencia entre el Currículum Vitae mecanografiado y la escritura en aquellos factores relacionados con la estructuración intelectual del individuo que en aquellos otros que pueden estar más determinados por el sentido estético o por el tipo de instrumento que se utilice para mecanografiar. Esto nos lleva a deducir que el propio Currículum mecanografiado puede ser un buen predictor de la capacidad para estructurar las actividades, pero no por la calidad estética de su presentación, sino por su coherencia formal y conceptual.
Si tenemos en cuenta, además, que –cuando el Currículum no ha sido mecanografiado por el interesado- la persona que lo confecciona puede modificar la “puesta en página” pero es menos probable que cambie el estilo de redacción o la clasificación de los datos, podemos considerar que estos aspectos son más fiables de cara a su interpretación.
Por lo que afecta a nuestra hipótesis de trabajo, podemos decir que, en el momento actual de nuestra investigación, parece que se vislumbran correlaciones significativas, que serán verificadas a nivel estadístico con una muestra mayor de sujetos.
Otro aspecto importante de nuestro diseño es la realización de un seguimiento de los sujetos seleccionados, todos ellos con una buena capacidad –desde el punto de vista grafológico- para estructurar adecuadamente sus actividades. Este seguimiento es el que nos permite comprobar si la predicción realizada a partir de la Grafología y el Currículum Vitae se refleja en el rendimiento profesional de los sujetos. Esta fase del diseño está siendo llevada a cabo actualmente.
Anexo: TABLAS DE RESULTADOS
Tabla 1: TAMAÑO DE LA ESCRITURA / CALIFICATIVOS C.V.
|
NÚMERO DE CALIFICATIVOS EN EL C.V.
|
||||
0 |
1 a 5 |
5 a 10 |
TOTALES
|
||
T A M A Ñ O
D E
L A
E S C R I T U R A
|
PEQUEÑO
(Menor de 2,5 mm) |
128
(69%) |
24
(13%) |
|
152
82% |
NORMAL
(de 2,5 a 3,5 mm) |
|||||
GRANDE
(Mayor de 3,5 mm) |
15
(8%)
|
18
(10%) |
|
33
(18%) |
|
TOTALES |
143
(77%)
|
42
(23%) |
|
185
(100%) |
Tabla 2: RASGOS PERSONALES
|
RASGOS PERSONALES EN EL C.V.
|
|||||
0 |
1 a 5 |
2 a 5 |
Más de 5 |
TOTALES
|
||
Nº
R A S G O S
P E R S O N A L E S
E S C R I T U R A
|
0 |
4
(2%) |
|
|
|
4
(2%) |
1 a 5 |
37
(20%) |
19
(10%) |
6
(3%) |
4
(2%) |
66
(35%) |
|
5 a 10 |
32
(17%) |
37
(20%) |
9
(5%) |
4
(2%) |
82
(44%) |
|
Más de 10 |
6
(3%) |
5
(3%) |
15
(8%) |
7
(4%) |
33
(18%) |
|
TOTALES |
79
(42%)
|
61
(33%) |
30
(16%) |
15
(8%)
|
185
(100%) |
Tabla 3: ERRORES U OMISIONES
|
Nº DE ERRORES U OMISIONES EN EL C.V.
|
|||||
0 |
1 a 5 |
2 a 5 |
Más de 5 |
TOTALES
|
||
Nº
E R R O R E S
U
O M I S I O N E S
E S C R I T U R A
|
0 |
71
(38%) |
19
(10) |
|
|
90
(48%) |
1 a 5 |
37
(20%) |
43
(23%) |
|
4
(2%) |
84
(45%) |
|
5 a 10 |
6
(3%) |
|
|
2
(1%) |
8
(4%) |
|
Más de 10 |
3
(2%) |
|
|
|
3
(2%) |
|
TOTALES |
117
(63%)
|
62
(33%) |
|
6
(3%)
|
185
(100%) |
Tabla 4: EL PUNTO Y APARTE
|
PUNTO Y APARTE EN EL C.V.
|
|||
TODOS COLOCADOS EN EL MISMO LUGAR
|
COLOCACIÓN IRREGULAR |
TOTALES
|
||
P U N T O
Y
A P A R T E
E N
L A
E S C R I T U R A
|
TODOS COLOCADOS EN EL MISMO LUGAR
|
116
(63%) |
9
(5%) |
125
(68%) |
COLOCACIÓN
IRREGULAR |
32
(17%)
|
28
(15%)
|
60
(32%) |
|
TOTALES |
148
(80%) |
37
(20%) |
185
(100%)
|
Tabla 5: LA CLARIDAD DE PRESENTACIÓN (1)
|
SEPARACIÓN ENTRE PÁRRAFOS EN EL C.V.
|
|||
SEPARACIÓN
|
NO SEPARACIÓN |
TOTALES
|
||
C L A R I D A D
D E
L A
E S C R I T U R A
|
SEPARACIÓN ENTRE HAMPAS Y JAMBAS
|
88
(48%) |
37
(20%) |
125
(68%) |
CHOQUES ENTRE HAMPAS Y JAMBAS |
42
(23%)
|
18
(9%)
|
60
(32%) |
|
TOTALES |
130
(71%) |
55
(29%) |
185
(100%)
|
Tabla 6: LA CLARIDAD DE PRESENTACIÓN (2)
|
SEPARACIÓN ENTRE APARTADOS EN EL C.V.
|
|||
SEPARACIÓN
|
NO SEPARACIÓN |
TOTALES
|
||
C L A R I D A D
D E
L A
E S C R I T U R A
|
SEPARACIÓN ENTRE HAMPAS Y JAMBAS
|
122
(66%) |
3
(2%) |
125
(68%) |
CHOQUES ENTRE HAMPAS Y JAMBAS |
55
(29%)
|
5
(3%)
|
60
(32%) |
|
TOTALES |
177
(95%) |
8
(5%) |
185
(100%)
|
Tabla 7: LA CLARIDAD DE PRESENTACIÓN (3)
|
PRECISIÓN DEL LENGUAJE EN EL C.V.
|
|||
PRECISIÓN
|
NO PRECISIÓN |
TOTALES
|
||
C L A R I D A D
D E
L A
E S C R I T U R A
|
SEPARACIÓN ENTRE HAMPAS Y JAMBAS
|
117
(62%) |
8
(4%) |
125
(68%) |
CHOQUES ENTRE HAMPAS Y JAMBAS |
8
(4%)
|
52
(28%)
|
60
(32%) |
|
TOTALES |
125
(68%) |
60
(32%) |
185
(100%)
|
Tabla 8: LA CLARIDAD DE PRESENTACIÓN (4)
|
PRECISIÓN DEL LENGUAJE EN EL C.V.
|
|||
PRECISIÓN
|
NO PRECISIÓN |
TOTALES
|
||
C L A R I D A D
D E
L A
E S C R I T U R A
|
SEPARACIÓN ENTRE PALABRAS NORMAL
|
115
(62%) |
11
(6%) |
126
(68%) |
SEPARACIÓN ENTRE PALABRAS INADECUADA |
12
(7%)
|
47
(25%)
|
59
(32%) |
|
TOTALES |
127
(69%) |
58
(31%) |
185
(100%)
|
Tabla 9: EL MARGEN IZQUIERDO
|
MARGEN IZQUIERDO EN EL C.V.
|
||||
PEQUEÑO |
NORMAL |
GRANDE |
TOTALES
|
||
M A R G E N
I Z Q U I E R D O
E S C R I T U R A
|
PEQUEÑO
|
6
(3%) |
18
(10%)
|
16
(8%)
|
30
(21%) |
NORMAL
|
9
(5%) |
37
(20%)
|
22
(12%)
|
68
(37%)
|
|
GRANDE
|
7
(4%)
|
13
(7%) |
57
(31%)
|
77
(42%) |
|
TOTALES |
22
(12%)
|
68
(37%) |
95
(51%) |
185
(100%) |
Tabla 10: EL MARGEN SUPERIOR
|
MARGEN SUPERIOR EN EL C.V.
|
||||
PEQUEÑO |
NORMAL |
GRANDE |
TOTALES
|
||
M A R G E N
S U P E R I O R
E S C R I T U R A
|
PEQUEÑO
|
15
(8%) |
11
(6%)
|
7
(4%)
|
33
(18%) |
NORMAL
|
19
(10%) |
29
(16%)
|
15
(8%)
|
63
(34%)
|
|
GRANDE
|
22
(12%)
|
22
(12%) |
45
(24%)
|
89
(48%) |
|
TOTALES |
56
(30%)
|
62
(34%) |
67
(36%) |
185
(100%) |