GRAFOLOGÍA HOY Boletín de Información Grafológica Nº 1, ENERO 2001 CIG-CONSULCOR Consultores Psico-grafológicos |
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SUMARIO
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EDITORIAL ¡Al fin estamos en la red! Hace ya muchos años que, cada vez que nos reuníamos un grupo de grafólogos en un congreso, actividades formativas, etc., comentábamos la necesidad de mantener estrechas relaciones entre nosotros y, al mismo tiempo, permanecer en contacto con la realidad social, que es la que -en última instancia- nos marcaría las líneas de actuación en nuestros trabajos de investigación y desarrollo de la ciencia grafológica. Desde entonces, se han hecho muchos intentos para alcanzar ese objetivo. Hoy, Internet nos permite recorrer con mayor facilidad el camino que nos lleva a la meta, a la vez que amplía considerablemente nuestros horizontes, con una inversión menor de tiempo y de recursos materiales. Lo que pretendemos con este Boletín de Información Grafológica es, precisamente, crear un foro de debate en el cual podamos participar grafólogos y no grafólogos, fomentando así el crecimiento y actualización de la Grafología. Algunos de los temas tratados tienen como finalidad abordar cuestiones que susciten el debate, y esa es, precisamente, nuestra intención. Ahora empezamos a recorrer el camino. Tenemos bien definido el objetivo, pero la meta se sitúa en un horizonte muy amplio, que debemos definir poco a poco. También, contamos con un alto grado de motivación para compartir nuestras experiencias. Pero no todo depende del equipo de CIG-CONSULCOR -si así fuese, no alcanzaríamos nuestro objetivo- sino de la colaboración de todas aquellas personas que se sientan identificadas con con nuestras inquietudes. La periodicidad que pretendemos mantener para este boletín es trimestral y, para ello, necesitamos que los lectores que así lo deseen, nos envíen sus aportaciones antes del día 15 de marzo a la siguiente dirección electrónica: info@grafologia10.com. Estamos seguros de que, entre todos, lograremos llegar a la meta. |
LA IDENTIDAD Y EL PERFIL PSICOLOGICO DEL CRIMINAL En criminología es relativamente frecuente tener que cotejar determinadas escrituras para que la investigación se proyecte hacia una vía u otra. Esta documentado el caso de una persona muerta en su apartamento, apuntando todas las evidencias hacia un suicidio. Entre las pruebas aportadas, los investigadores de la Policía Técnica Judicial (PTJ) localizaron una carta que al parecer se había escrito momentos antes de la muerte y que evidenciaba el supuesto del suicidio. Los expertos grafotécnicos de la PTJ, recopilaron numerosos escritos del presunto suicida para comparar con la carta manuscrita de despedida, concluyendo que había sido escrita por otra persona. La investigación posterior demostró que se trataba de un asesinato cometido por la persona que pretendía heredar la fortuna del fallecido. Partimos de este supuesto para tratar un aspecto básico dentro de la Grafología y que se puede prestar a confusión terminológica. Grafología y Grafotécnica En casos como el citado, los instrumentos usados por la PTJ son los propios de la Grafotécnica. Y no conviene confundir este término con el de Grafología, ya que se trata únicamente de uno de los numerosos instrumento de esta. Normalmente al hablar de Grafología nos estamos refiriendo a una ciencia que se aplica en Psicología. Mientras que la Grafotécnica constituye un instrumento de medida de un carácter preciso que, aplicada con rigor por especialistas, es practicamente una ciencia matemática aplicada en el ámbito judicial. Cuando realizamos un estudio grafológico, lo que estamos haciendo es trabajar simultáneamente sobre los múltiples factores y signos que constituyen el conjunto del escrito. Resulta indudable que a diferentes personalidades corresponden diferentes tipos de letras, e igualmente resulta claro que, en una misma persona, a diferentes estados de ánimo, corresponden variaciones notables en la escritura. Todo ello es lógico si tenemos en cuenta que las alteraciones anímicas y los diferentes temperamentos se ven reflejados en una correspondencia física que se transmite desde el cerebro hasta el sistema nervioso y la masa muscular. Evidentemente, la escritura será una proyección de todo ello. Y si la Grafología se mueve en el terreno sutil del espíritu humano, la Grafotécnica, como disciplina científica de las ciencias experimentales, encaminada al estudio, análisis y observación de los caracteres gráficos se fundamenta en la aplicación de un método de estudio relacionado con la motricidad automática del ejecutante, a través del cual se identifican los puntos característicos absolutamente particulares de la escritura. La Grafotécnica es eminentemente comparativa, es decir, necesita varios escritos para poder aplicarse. Y los expertos aseguran que la grafotécnica, aplicada correctamente, es tan exacta como la dactiloscopia. Se parte de que hay rasgos que es imposible disfrazar o ser imitados por otras personas. Los expertos señalan que, si bien es cierto que mientras algunos rasgos sí pueden ser imitados, existen otros, perfectamente definidos por las técnicas grafotécnicas, que son tan peculiares en su individualidad (porque responden a gestos-tipo de la coordinación de los movimientos del brazo, antebrazo, mano y dedos) son inasequibles a terceras personas. (Este trabajo se ha basado en un estudio de LABORATORIO GRAFOTÉCNICO ORTA POLEO S.C.) |
LA IMPORTANCIA DE LA GRAFOLOGÍA EN LA EMPRESA Nuestros alumnos no españoles, especialmente latino-americanos, nos preguntan con frecuencia sobre el grado de penetración e incidencia de la Grafología en España. Hay un dato significativo y es el uso que las empresas hacen de esta especialidad en la selección de personal. Y el hecho no es baladí, ya que precisamente son estas las que conocen la importancia de hacer una selección de su personal eficaz y ajustada al puesto de trabajo, tanto en su aspecto humano como en el técnico. En este sentido, se puede decir que la grafología se convierte en un instrumento -si no imprescindible, al menos muy valioso- para que los procesos de selección se inicien con un rigor que no esta al alcance de otros tests psicotécnicos y proyectivos. Y, volviendo a la pregunta inicial de nuestros alumnos, diremos que en España, aunque la utilización de la Grafología es una práctica habitual en muchas grandes empresas, no sucede lo mismo con las PYMES. Carmen Giménez Camino, psicóloga y grafóloga, nos aporta el dato de que en Francia y Alemania, su uso dentro de la selección de personal se acerca al 90% (Món Empresarial / Nº 23 / Diciembre 2000). La importancia del dato es directamente proporcional al hecho de que la empresa se juega su capital económico y su prestigio, en función de una buena o mala selección de su capital humano. Un buen estudio grafológico analizará aspectos claves sobre el comportamiento futuro del trabajador en la empresa. No sólo valorará características relacionadas con su rendimiento directo, tales como su capacidad para trabajar en equipo, creatividad, facilidad de comunicación, grado de concentración, rapidez en la toma de decisiones, sentido de la responsabilidad, etc., sino que también incidirá en otros factores de su personalidad que pueden ser relevantes para el puesto a ocupar. Por ejemplo, cómo se adaptará a la filosofía de la empresa o a sus diferentes políticas. Lo fundamental del informe que el equipo grafológico presentará a los responsables de la selección del personal de una empresa empresa debe consistir en que el análisis se centre directamente en la comparación entre el perfil de una determinada persona y el perfil del puesto concreto a cubrir. Por sus características, una prueba grafológica, realizada sobre una carta manuscrita del candidato, se constituye en el medio idóneo de análisis al ser la escritura una actividad cotidiana del sujeto y que, por lo tanto, no puede estar sujeta a manipulaciones ni cambios significativos (a pesar de que el grafólogo siempre tiene en consideración que, cuando una persona escribe una carta con el objetivo de presentar su candidatura a un proceso de selección de personal, lo más probable es que cuide la forma y la presentación del escrito bastante más de lo que lo suele hacer habitualmente). La combinación del estudio grafológico con la entrevista, es una fórmula ideal dentro de la selección de personal. Y muy especialmente cuando se trata de un puesto de trabajo en el que se debe hacer una pre-selección entre decenas de solicitudes, ya que la entrevista por sí sola sería un método altamente costoso por la necesidad de dedicar a la misma una gran cantidad de tiempo, lo mismo que sucede con muchos tests psicotécnicos o técnicas de grupo. Sin embargo, combinada con la Grafología, se llega a selección previa y rápida que facilita enormemente el trabajo del entrevistador, que tendrá además, una información adicional que le será muy útil para elegir con garantías al candidato adecuado. Para que esto suceda, los responsables del proceso de selección deberán confeccionar previamente un perfil con los requerimientos del puesto de trabajo y limitar el estudio grafológico de las cartas enviadas por los candidatos a los rasgos definidos en ese perfil. No se trata de hacer un informe de personalidad exhaustivo, sino de determinar hasta qué grado los candidatos reúnen las características imprescindibles y deseables para desempeñar con éxito el puesto de referencia. Los datos obtenidos en el estudio grafológico previo ayudan al seleccionador a conducir la entrevista eligiendo en qué temas es conveniente profundizar más o qué dudas necesita resolver respecto al potencial del candidato al puesto de trabajo. Además de las ventajas señaladas, la grafología puede ser un instrumento valioso a la hora de optimizar el rendimiento laboral de los trabajadores de una empresa, especialmente si se trata de reajustes estructurales en la plantilla, ascensos o cambios de puestos. |
TEMA A DEBATE: GRAFOLOGÍA Y SEXO (Comentarios Basados en un texto de Alfredo Binet) Los antecedentes más inmediatos a los estudios sobre la posibilidad de determinar el sexo a través de la escritura parten del hecho de que el Abate Michón había declarado que era imposible determinar el sexo del escribiente basándose exclusivamente en la forma del escrito. Crépieux-Jamin le rebate diciendo que, si cada sexo tiene sus propias características, igualmente tendrá su propia escritura, y esto, para ejemplificarlo de una manera más clara, lo hace diciendo que al igual que la escritura va cambiando con la edad, a psicologías diferentes corresponden escrituras diferentes. Este trabajo parte del hecho de que cualquier investigador que quiera obtener datos científicos sobre este tema, siempre partirá, al menos, del hecho contrastado de un 50% de aciertos. Por lo tanto, el índice de aciertos debe ser superior al 50% para que tengan un valor significativo y no casual. En el trabajo de investigación realizado por Binet a principios de los cincuenta y publicado en su obra "Grafología y Ciencia", uno de sus aciertos fue contrastar los resultados obtenidos por profesionales con aquellos otros de personas no expertas en grafología. Binet partió de 180 sobres, escritos por hombres y por mujeres, en número equivalente. El hecho de que fueran sobres tenía como finalidad eliminar factores de riesgo contaminantes, como el contenido, el estilo, etc. En su trabajo no se limitó a medir el número de aciertos y errores, sino que también trató de averiguar los elementos y los signos gráficos que habían llevado a un grafólogo profesional a obtener una conclusión determinada. La pregunta fue: ¿En qué signo reconoce el sexo en la escritura?. Los resultados obtenidos fueron suficientemente significativos, por cuanto los expertos dieron un índice de acierto aproximado del 75%, mientras que los neófitos en grafología (preferentemente maestros) dieron un índice de aciertos que fue reflejado en una franja comprendida entre el 65% y el 70%. Por lo tanto, concluye el estudio dándole la razón a Crepieux-Jamín (1859-1940) y denegándosela al padre de la grafología (el abate Michon 1806-1881). También se debe decir que entre uno y otro había ... ¡tantos años de diferencia!... Entre los signos más destacados que señalaron los expertos para diferenciar las escrituras, consideraron que las femeninas son más frágiles, graciosas, finas, ligeras y con tendencia a ser inclinadas. Los finales largos y algunas letras sobrealzadas también fueron consideradas como indicadoras. Menos angulosas que la de los hombres. En el hombre se consideraron aspectos tales como la firmeza, presión, energía, presión, sobriedad y simplificación, así como mayor angulosidad. Coincidieron en señalar los expertos que en la mujer destacaban factores como la bondad y la gracia, mientras que en hombre destacaban la firmeza y la seguridad. Actualmente en CIG-CONSULCOR desarrollamos un trabajo de investigación con el fin de detectar la evolución que las escrituras, y su relación con los géneros masculinos y femeninos, han sufrido en la actualidad. El principio del estudio parece indicar que los parámetros diferenciadores siguen siendo suficientemente significativos en la actualidad, pero que los porcentajes han ido disminuyendo progresivamente. (nos parece dudoso que, en la actualidad, pueda diferenciarse de un modo tan claro el sexo en la escritura). Esto es debido a la transmutación en los roles que se ha producido, de una manera progresiva, en el siglo XX. Este estudio nos lo hemos planteado a largo plazo, y la aportación de los lectores nos será de gran ayuda para enriquecer el mismo. |
ASESINATO GRAFOLÓGICO "Enviar carta manuscrita al Departamento de Recursos Humanos". Eisame Ibérica Control, S.A. (Ref. 486, Srta. Marta Aguado). Largo rato se quedó mirando aquel aspecto del anuncio. Gato encerrado le parecía que podía estar detrás de aquella exigencia de "carta manuscrita". Es verdad que le fastidiaba especialmente romper la monotonía informática que le permitía enviar ingentes cantidades de "curriculum vitae" y cartas de presentación modificando apenas unos datos. Pero la petición de la Srta. Marta Aguado venía a romper su cómoda dinámica de búsqueda laboral para entrar en un terreno mucho más personal y comprometido. Sin embargo, estaba dispuesto a dar la batalla grafológica documentándose adecuadamente. Para lo cual se dirigió a la biblioteca pública con el fin de empaparse por activa y por pasiva de todo aquello que tuviera que ver con el tema. Apenas llevaba trece libros estudiados, cuando ya había llegado a las siguientes conclusiones: A) El éxito de la interpretación grafológica reside en la correcta valoración de los signos según su importancia jerárquica dentro del espacio gráfico. B) El análisis tendrá en cuenta el puesto a cubrir, así como las características de los superiores y el equipo con el que se debe trabajar. C) Los signos dominantes reflejan las cualidades más externas y visibles del sujeto, mientras que los secundarios hacen referencia a las tendencias inconscientes. Con este "abc" básico pasó a estudiar lo que la señorita Marta estaba buscando en esta carta de puño y letra que tanto le incordiaba. Estaba convencido de que trataría de averiguar aquellos aspectos temperamentales y sus funciones psíquicas predominantes hasta encontrar la fórmula caracterológica de compatibilidad laboral. A medida que profundizaba en su investigación, se iba sintiendo más y más inquieto. Ahora sabía que analizarían con lupa el orden y la distribución de su escritura en el blanco inmaculado de la hoja de papel. La altura, anchura, tensión, presión y profundidad de las letras, grado de inclinación, peso y relieve del escrito. Ejecución, coligamentos, estética y rapidez del gesto gráfico. Así, cuando inició aquella maldita carta, estaba realmente impresionado por todo lo que había averiguado sobre el asunto. Sentía que la señorita Marta Aguado iba a saber más de él que su propia madre. Aún así se dispuso a dar la batalla grafológica. Empezó a escribir dejando un buen margen derecho. Espaciando suficientemente las líneas. Cuidando que todas las letras fueran legibles y la inclinación adecuada. Hasta aquí todo fue bien, pero cuando se dio cuenta de que, a pesar de todas sus precauciones, la barra de la "t" era demasiado alta, de que el punto de la "i" estaba muy adelantado y de que el óvalo de la "o" no estaba suficientemente cerrado, empezó a sudar copiosamente, mientras un escalofrío recorría su espina dorsal. Le temblaban las manos y la cabeza le daba vueltas. Al día siguiente, el desayuno permaneció intacto en el comedor. Su madre se asustó. Acudió a su habitación y se encontró con la luz encendida, la cama sin deshacer y la ventana abierta de par en par. Con un grito desgarrador corrió hacia ella y allí, abajo, sobre el césped del jardín, estaba su hijo con una "o" minúscula en la sien. Nadie supo nunca por qué intentó quitarse la vida precisamente con esa vocal. |
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